Flint

Niño, aunque tome tu mano
y sobre la nieve andemos el camino;
aunque sigamos juntos las huellas del ratoncito,
aunque juntos nos esforcemos en abrir el misterio
de la palabra escrita, y descubrir poco a poco
porqué dos y tres hacen cinco
siempre, en un mundo incierto –

niño, aunque debo enseñarte mucho,
¿qué hay, al final,
salvo que juntos
debemos ser hijos
del mismo Padre
y necesito desaprender
la estructura toda de adulto
y los años abrumadores

y tú me debes enseñar
a mirar el cielo y la tierra
con tu nueva maravilla.


Fuente: Poemas para el Día de las Madres