bfly10

Es posible decir que los niños conocen a Dios mejor que los adultos. No a través de la comprensión, sino simplemente como la bondad que fluye a través de su ser entero. Esta es una forma más primaria, y de algún modo más perfecta, de conocer a Dios. Su experiencia de vida es algo más parecido a la misma esencia de la oración contemplativa.


Fuente: La oración de los niños